Si eres dueño de un perro y vives en un edificio con ascensor, es importante que sepas cómo garantizar la seguridad de tu mascota mientras lo utilizas. Debes tomar medidas para prevenir accidentes en el ascensor, ya que desafortunadamente, estos sucesos ocurren con más frecuencia de lo que se cree.
Según la normativa, ¿Está permitido subir a mi mascota en el ascensor comunitario?
Es importante saber que no existe ninguna ley que prohíba expresamente a los perros u otras mascotas de compañía subir a los ascensores, por lo que legalmente no es posible que te lo impidan. Sin embargo, dentro de las comunidades de vecinos, es común que se establezcan normas y reglas de convivencia que deben ser respetadas por todos los vecinos.
La publicación de la norma EN81-20/50:2014, en la que se establece que los ascensores de nueva instalación deben contar con cortinas infrarrojas en lugar de células fotoeléctricas, ha supuesto una mejora en la seguridad de los usuarios. Las diferencias que hay entre unas y otras son:
- Las células fotoeléctricas solo detectan obstáculos en una altura específica de la puerta del ascensor y no pueden detectar obstrucciones por encima o por debajo del haz infrarrojo. Esto puede resultar peligroso ya que la puerta podría cerrarse y golpear algo que esté fuera del haz de luz, esto puede afectar directamente a los perros que estén cruzando la puerta. Además, estas células no pueden detectar las correas a menos que interrumpan el haz de luz, lo que representa un grave riesgo de accidente para nuestras mascotas. Ya que, si alguien al mismo tiempo desde otro piso solicita el ascensor, las puertas se podrían cerrarse y, al ponerse en marcha el ascensor, el perro puede quedar atrapado.
- Por el contrario, las cortinas o barreras de infrarrojos deben cubrir desde el suelo de la cabina hasta 1’60 m de altura, con una distancia mínima de detección de 25 milímetros. Son capaces de identificar cualquier obstáculo de más de 50 mm de diámetro, lo que significa que pueden detectar objetos más pequeños, como las correas de los perros, en un área mayor que las células fotoeléctricas convencionales.
Ambos sensores funcionan de manera similar: cuando un objeto u persona interfiere con uno de los rayos, el sistema detiene el movimiento y abre la puerta. Sin embargo, las cortinas de infrarrojos son la opción preferible en situaciones imprevistas dentro del ascensor, ya que detectan un área más amplia y pueden detectar la presencia de un perro dentro de la cabina cuando todavía no hemos entrado o viceversa.
3 consejos que te servirán cuando vayas en el ascensor con tu mascota:
- Asegúrate de que pasa primero al fondo del ascensor y sitúate entre este y la puerta.
- Lleva al perro en brazos o mantenlo cerca de ti.
- Ten mucho cuidado con la correa, vigila que no quede atrapada por la puerta.
Recomendaciones para evitar conflictos con los vecinos más reacios a las mascotas:
- Si te topas con algún vecino que no se sienta cómodo compartiendo el ascensor con tu perro, es mejor dejar que use el ascensor primero y esperar el siguiente turno. Así evitarás conflictos y posibles enfrentamientos.
- Si tu perro hace sus necesidades en un lugar inapropiado, como la cabina del ascensor, asegúrate de limpiarlo.
- Mantener la higiene de tu mascota es esencial, ya que el ascensor es de uso común. Si no lo haces, puede generar malos olores o suciedad que molesten a tus vecinos.
- No dejes a tu perro solo en el ascensor, aunque sea por un corto período de tiempo. El estrés que puede sentir al cerrarse las puertas y el movimiento del ascensor pueden aumentar el riesgo de accidentes.
Si tienes alguna duda acerca del mantenimiento de ascensores o quieres que te asesoremos sobre esta o cualquier cuestión, en Ascensores Abando te atenderemos sin ningún tipo de compromiso.
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