Ventajas del ascensor doméstico frente al tradicional: las 4 más importantes

Principales ventajas del ascensor doméstico frente al convencional

Las ventajas del ascensor doméstico pueden no ser muy evidentes para muchas personas, ya que hasta hace poco tiempo este servicio estaba solo al alcance de unos pocos. Esto se debía, principalmente, a su coste de instalación y mantenimiento, a causa del que los ascensores domésticos se instalaban tradicionalmente en viviendas de alto poder adquisitivo o en las que uno de sus miembros tuviera problemas de movilidad.

Todo esto ha cambiado ya. Los ascensores domésticos son mucho menos costosos que hace unos años, y pueden considerarse una inversión rentable para muchas personas. Las soluciones en elevación, incluyendo algunas tan innovadoras como los modernos ascensores hidráulicos, pueden ahora adaptarse con mayor facilidad a todo tipo de viviendas y edificios, incluso los de poca altura.

Una parte importante de las ventajas del ascensor doméstico se debe a las diferencias entre este y el ascensor tradicional. Los ascensores domésticos son más lentos (alrededor de 0,6 m/s), carecen de cuadro de máquinas, presentan un menor consumo energético y son, en general, más sencillos de mantener. Por estas razones, presentan las siguientes ventajas:

1. Instalación más económica y con menos requisitos.

El precio de la instalación de un ascensor doméstico es mucho más reducido que el de la instalación de un ascensor convencional. También son menores los requisitos para la obra (menor profundidad, e incluso pueden instalarse sin foso) y los relativos a las características del edificio (altura, por ejemplo).

2. Ahorro de energía.

Los números hablan por sí mismos: un ascensor doméstico consume entre 2,2 y 2,7 kW menos que un ascensor convencional. De hecho, puede funcionar con la potencia eléctrica que haya contratada en la casa, sin la necesidad de contratar energía adicional.

3. Ahorro en mantenimiento.

El mantenimiento de los ascensores en viviendas debe realizarse cada 4 meses. Además, no necesitan una línea de teléfono exclusiva. Ambos factores suponen un ahorro económico considerable a fin de mes.

4. Mejora en la accesibilidad.

Dentro de las ventajas del ascensor doméstico frente al ascensor tradicional, esta es, tal vez, una de las principales: estos elevadores son perfectos para hacer más sencilla la vida de las personas con problemas de movilidad. Lo que ganarán en independencia y calidad de vida sin duda compensa el coste de la instalación.

Olvídate de las dudas y no lo dejes para mañana: elige ganar comodidad, agilidad e independencia con un servicio de elevación moderno y a un coste más reducido de lo que imaginarías. Una vez compruebes los beneficios que te ofrece un ascensor doméstico, te preguntarás cómo has podido pasar todos estos años sin él.

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